Cuando me fui de baja antes de dar a luz, me parecía tan lejana la fecha de dar a luz.... pero de repente, y sin darme cuenta quedaba un mes...
Y yo no hacía más que llorar, pensando que iba a abandonar a mi hijo, me sentía como la mamá de Dumbo
Le miraba fijamente, y pensaba lo que me iba a perder y rompía a llorar, llegó un momento en el que Marido se preocupó de verdad por mi y me alentaba diciendo: ¡Venga que te vendrá bien! ¡Qué necesitas tu tiempo de hablar con adultos, de sentirte útil!
Y yo le contestaba: ¡No! útil me siento cuando acuno a mi niño y se duerme o le doy de comer... no trabajando....
Era inevitable, tenía que volver.
Un par de meses antes, fui a hablar con mis jefes de la reducción de jornada, y sorprendentemente me la dieron (me tiré 6 meses dándole vueltas al horario, a que me dirían... iba super agobiada y muerta de miedo a que me dijeran que no)
Y llegó el día.... al tener siempre turno de tarde, pude pasar la mañana con él, y lloré antes de irme, lloré al dejarle.. y tenía tanto miedo a que tuviera en cuenta que me había ido y me hiciera gesto de desprecio por "abandonarle"....
Pero, para mi sorpresa ¡¡GRITÓ DE EMOCIÓN AL VERME!! Yo le abrazaba y no paraba de llorar diciéndole mi niño mi niño!! Tuve un déjà vu y parecía que había vuelto al día del parto 😂 abrazando a mi niño y llorando.
Había superado el primer día, y los siguientes fueron muy sencillos, debido a mi horario corto, sólo me separaba de él unas horas, y al volver como estaba aún despierto, podía darle un biberón y acostarle.
Si tienes que incorporarte pronto al trabajo, solo decirte que ¡Tú puedes! el primer día será duro, pero si has podido con un parto/cesárea y la lactancia, puedes con esto.
¡Ánimo!